Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



domingo, 14 de noviembre de 2010

De Por Qué Colosenses 1:24 No Es un Argumento Católico

Uno de los versículos que más repiten los católicos para defender la insuficiencia del sacrificio de Jesús en la cruz es Colosenses 1:24,
24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia;
Una lectura superficial de dicho versículo, hace que el católico encuentre justificación en sus sacramentos, no obstante, como demostraré en esta entrada con ayuda de Dios, dicho versículo no es nada más que una descontextualización más dentro del argumentario católico.

En efecto, porque lo primero que hemos de tener claro es que si Pablo está diciendo que el sacrificio de Jesús en la cruz no fue suficiente para redimir a su pueblo, y que hemos de obrar para alcanzar la Salvación...

Estamos ante un problema.

Por qué?
Porque la Biblia nos deja claro, por un lado, la absoluta suficiencia del sacrificio de Jesús en la cruz, y por el otro, que la Salvación es por Gracia, no por obras.

De ello he hablado en entradas anteriores.
Recomiendo una lectura de aquellas que se encuentran bajo las etiquetas de Efesios, las de la serie titulada De Cuáles Son los Errores del Catolicismo a la Hora de Definir qué Es la Justificación, y sobretodo la entrada titulada De Hebreos 10:14, ya Sabes, de que con Un Sacrificio Hizo Perfectos para Siempre a los que Está Santificando o, Nada de Penitencias, para entender por qué no puede ser que Pablo nos esté hablando de la necesidad de un contínuo obrar para completar la insuficiencia del sacrificio expiatorio de Jesús.

Por tanto, de que nos está hablando Pablo?

Como siempre, hemos de ir al contexto de la carta a los colosenses.

En efecto, el propósito de dicha carta es combatir la herejía de Colosas, una herejía que -entre otras cosas- sobrevaloraba a los ángeles, minusvalorando consecuentemente a Jesús, de ahí que uno de los objetivos de Pablo sea el de recalcar el papel preeminente de Jesús en el Plan de Dios.

No es irónico que sea precisamente de una carta a través de la cual Pablo quiere mostrar la absoluta supremacía de Cristo, de donde han tomado el catolicismo argumentos para defender la insuficiencia del sacrificio de Jesús?

Cierto, es irónico.
Y trágico.

Pero volvamos al tema.
Si leemos dicha carta, comprobamos de inmediato el propósito de Pablo a la hora de demostrar la absoluta supremacía de Jesús,
8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.

9 Porque en él habita toda la plenitud de la Divinidad corporalmente,

10 y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad
.
Nada de adorar ángeles, dice Pablo, pues Dios los creó mediante Jesús, nada de insuficiencias, pues Jesús reconcilió el mundo mediante su sacrificio, el mundo es cristocéntrico, afirma Pablo una y otra vez a lo largo de esta epístola.

Así pues, de qué nos está hablando Pablo en 1:24?

De santificación, no de justificación, pues esta última es realizada exclusivamente por Dios.

Los cristianos somos justificados por Gracia mediante la fe, no por nuestras obras, pues Dios planeó que fuera así para garantizar la promesa a los de la fe.

Es decir, en nuestra justificación, el obrar no tiene papel alguno, no obstante, en nuestra santifcación, el obrar tiene un papel fundamental.

La santificación es el proceso que se desarrolla a lo largo de la vida del creyente mediante el cual, el Espíritu Santo que mora en él, va moldeando su carácter a imagen de Cristo.
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Romanos 8
En la santificación, es necesario obrar y -con la ayuda de Dios que mora en nosotros- vencer las tentaciones, despojarnos de los viejos ropajes de nuestra pasada naturaleza, y avanzar en el conocimiento de nuestro Creador.

Es el Espíritu Santo que mora en nosotros el que produce en nosotros tanto el querer como el hacer, pues es la garantía de nuestra redención final, de nuestra Salvación,
6 estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;
Ahá, todavía no he contestado a la pregunta de qué nos está hablando Pablo.

Pablo nos está hablando de su propia santificación.

Leamos de nuevo el versículo, y enmarquémoslo en el contexto,
24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia;
Pablo les está diciendo, todas mis luchas, todos mis sufrimientos, en realidad me producen alegría (Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros), pues son necesarios para dar fruto.
16 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.
2 Corintios 4
Este fruto es el abandono de la vieja naturaleza que me tenía esclavizado, es el moldeamiento de mi carácter a imagen de Jesús (y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo), es decir, completo en mí aquello que me falta para ser imagen de Jesús.

Como hemos visto en la cita de Romanos 8:29, los cristianos estamos llamados a ser imagen de Jesús,
19 Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros,
Gálatas 4

10 a fin de conocerle, (A Jesús) y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte,
Filipenses 3
Esta idea -el llamado a perseverar hasta ser imagen de Jesús por medio del Espíritu Santo- es corroborado unos pocos versículos más adelante cuando dice,
26 el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos,

27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria,


[...]

29 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí.
En efecto, Pablo nos está hablando de su ministerio para con los gentiles, anunciar a Jesús morando en los creyentes.

Y de qué manera lleva adelante Pablo dicho ministerio?

Mediante el poder de Cristo -el Espíritu Santo- en él.

Esto -la recepción del Espíritu Santo en el pueblo de Dios- es descrito por Pablo como un misterio, un mysterion, lo cual es una palabra que describe a todo designio de Dios que hasta el momento había sido mantenido oculto por Dios, pero que es revelado en este tiempo.

El contexto inmediato no nos habla de Justificación, nos habla de santificación, de cómo obra Pablo su ministerio, del Espíritu Santo que mora en todo creyente, y de la transformación que este misterio -Cristo en nosotros- produce en todo cristiano.

En el capítulo tercero de esta misma carta, Pablo repite todo lo que hemos visto, fijaos:
5 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;

[...]

7 en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.

8 Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.

9 No os mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,
Pablo les dice, aquello ya ha pasado, sois salvos e hijos de Dios, por tanto, actuad en consecuencia, es decir, no haced y haced para ser salvos, sino, ya que sois salvos, actuad en consecuencia pues ahora Dios -mediante Su Espíritu- os ha capacitado para ello.

Sois nuevas criaturas y las nuevas criaturas actúan en consecuencia, y andan como Jesús anduvo
10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,.
Colosenses 3
De ahí que Pablo les deje claro a los colosenses que es Dios que mora en ellos, quien les está transformando
10 para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;

11 fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad;
En resumen, Pablo no nos está hablando en Colosenses 1:24 que él deba sufrir para completar el insuficiente sacricio de Jesús, no nos está diciendo que él debía obrar para ser salvo, lo que simplemente nos está diciendo es que a través de los sufrimientos que le causan el tener que llevar el Evangelio por el mundo, él va moldeando su carácter a imagen de su Creador, es decir, va santificándose.

Mientras meditais en todo ello, dad gracias a Dios Padre por todo en el Nombre de nuestro Señor Jesucristo...


48 comentarios:

Viviana dijo...

Hola Renton, muy buenas entradas... como has estado?

Un saludo desde el fin del mundo!

Viviana

Renton dijo...

Hola Vivi!

Viviana:
como has estado?

He estado esperando la segunda parte de tu relato, ya sabes.... lol!

Un abrazote a ti y a los tuyos.

A todos ellos...

:]

Emilio Alegre dijo...

Los católicos no creemos que el sacrificio de Jesús sea insuficiente. Todo lo contrario, sabemos que fue no sólo suficiente, sino SOBREABUNDANTE, con la medida de la misericordia y el amor, no con la medida de la justicia. Con muchísimo menos habría bastado para redimirnos.

Por eso, las palabras de Pablo y del Espíritu Santo las entendemos en este sentido: no es que falta nada per se al sacrificio de Cristo, sino que Cristo ha querido hacernos participar con nuestra propia cruz en su propio sacrificio, ha querido asociarnos a Él. Por eso todos somos hechos sacerdotes por el Bautismo, pasamos a formar parte del Cuerpo Místico de Cristo, el Cristo Total, que se ofrece al Padre en satisfacción por los pecados del mundo.

Emilio Alegre dijo...

Aclararé eso del sacerdocio común de los fieles: Cristo, único sacerdote, se ofrece a sí mismo -su cuerpo- como víctima. Nosotros nos ofrecemos en Él a nosotros mismos.

Esto es un gran misterio.

Renton dijo...

Longinos:
Los católicos no creemos que el sacrificio de Jesús sea insuficiente. Todo lo contrario, sabemos que fue no sólo suficiente, sino SOBREABUNDANTE

No Longinos, si fuera así, no exisstiría la doctrina del purgatorio.

Longinos:
no es que falta nada per se al sacrificio de Cristo, sino que Cristo ha querido hacernos participar con nuestra propia cruz en su propio sacrificio

Ahí Pablo no está diciendo nada de eso, está hablando de su propia santificación, de el contínuo obrar del Espíritu Santo en él, hasta transformarlo a imagen de Jesús en su muerte.

Longinos:
Nosotros nos ofrecemos en Él a nosotros mismos.

Esto es un gran misterio.


No, eso es la consecuencia de ignorar la Biblia y anteponer el catecismo a ella, pues nadie que la estudie podría decir tal cosa...

:|

Emilio Alegre dijo...

Renton, sólo en tu imaginación hay contradicción entre la doctrina del Purgatorio y la sobreabundancia de la gracia que nos viene por Jesucristo.

Pablo -si lo lees bien- no está diciendo que lo que está haciendo sirva sólo para su propia santificación -que sí, que sirve- sino que lo hace "en favor del Cuerpo de Cristo, que es la Iglesia". Es decir, lo que él hace en Cristo, vale para otros (participa del único sacerdocio de Cristo). Al decir "completo lo que falta", se hace evidente su participación en el sacrificio de Cristo.

Emilio Alegre dijo...

Sobre el Purgatorio, tienes que saber que los que van al Purgatorio ya están salvados, y sus pecados están perdonados. Los padecimientos del Purgatorio no son méritos para la salvación ni para el perdón de los pecados. Son purificación de su alma -ya salvada y perdonada- para poder entrar en la comunión con Dios. Son ese "paso a través del fuego" de que habla San Pablo para que el impuro llegue a la comunión con Dios.

Emilio Alegre dijo...

Incluso esa purificación, también es por los méritos de Cristo. Si no, esos padecimientos, ese fuego, valdrían tanto para purificarnos como valen los padecimientos y el fuego del infierno. Es decir: nada. Lo que es evidente es que muchos, que hemos sido perdonados y salvados, no estamos aún totalmente puros, y si muriéramos ahora mismo, necesitaríamos purificarnos para unirnos al Padre.

Dice 2 Macabeos 12 41-46:

41 Todos bendijeron el proceder del Señor, el justo Juez, que pone de manifiesto las cosas ocultas,

42 e hicieron rogativas pidiendo que el pecado cometido quedara completamente borrado. El noble Judas exhortó a la multitud a que se abstuvieran del pecado, ya que ellos habían visto con sus propios ojos lo que había sucedido a los caídos en el combate a causa de su pecado.

43 Y después de haber recolectado entre sus hombres unas dos mil dracmas, las envió a Jerusalén para que se ofreciera un sacrificio por el pecado. El realizó este hermoso y noble gesto con el pensamiento puesto en la resurrección,

44 porque si no hubiera esperado que los caídos en la batalla iban a resucitar, habría sido inútil y superfluo orar por los difuntos.

45 Además, él tenía presente la magnífica recompensa que está reservada a los que mueren piadosamente, y este es un pensamiento santo y piadoso. Por eso, mandó ofrecer el sacrificio de expiación por los muertos, para que fueran librados de sus pecados.

Está claro: el Espíritu Santo nos cuenta cómo los vivos ofrecen un sacrificio para purificar a los muertos. Obviamente aquellos por los que se ofrece el sacrificio serán los que no han ido al infierno, puesto que por el que está en el infierno, no se puede hacer nada. Y por el que está en el Cielo, tampoco se puede hacer nada, porque nada necesita quien a Dios tiene.

Renton dijo...

Longinos:
Al decir "completo lo que falta", se hace evidente su participación en el sacrificio de Cristo.

Pues no, se hace evidente su labor misionera, nada más.

El sacrificio de Jesús fue completo, completo Emilio, no recuerdas que ya hemos hablado de ello?

12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,

13 de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies;

14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

15 Y nos atestigua lo mismo el Espíritu Santo; porque después de haber dicho:


16 Este es el pacto que haré con ellos
Después de aquellos días, dice el Señor:
Pondré mis leyes en sus corazones,
Y en sus mentes las escribiré,

17 añade:
Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.


De ahí que no haya que hacer penitencia para pagar pecadillo alguno, de ahí que Pablo no tuviera participación alguna en el sacrificio del Señor.

Renton dijo...

Longinos:
Lo que es evidente es que muchos, que hemos sido perdonados y salvados, no estamos aún totalmente puros, y si muriéramos ahora mismo, necesitaríamos purificarnos para unirnos al Padre.

Cómo puedes hablar entonces de suficiencia del sacrificio de Jesús si después resulta que uno no es puro y debe... oig, es todo tan contradictorio.

Longinos:
Está claro: el Espíritu Santo nos cuenta cómo los vivos ofrecen un sacrificio para purificar a los muertos.

Que no Emilio, que eso era antes del sacrificio de Jesús, no puedes aplicar a los miembros del Nuevo Pacto, aspectos del Viejo.

Quien está en Cristo, y solo se puede estar en Cristo por fe, (la que viene de lo alto), ha sido comprado, ha sido redimido pues Jesús pagó por todos sus pecados en la cruz.

Eso es Evangelio básico...

:\

Emilio Alegre dijo...

Tu cabeza está llena de incompatibilidades que no son tales en la Escritura, Renton. Porque tú no entiendas cómo dos cosas pueden ser compatibles, no significa que no sean compatibles, si la Palabra de Dios así nos lo transmite. Tú crees -como yo- que Dios es Uno y Trino, y al entendimiento, esto parece incompatible, pero no lo es para la fe, porque la Palabra de Dios así nos lo ha revelado.

A los saduceos, les parecía contradictoria la resurrección con el matrimonio, y le pusieron a Jesús la "trampa" de la que se casó con varios hombres. Dios tiene poder para hacer compatible lo que a nosostros nos parece incompatible aplicando nuestro limitado entendimiento.

Hombre, lo de decir que 2 Macabeos vale sólo para el antiguo pacto, me parece que es un recurso que te ha venido al pelo, pero no me parece válido. Primero, porque la Antigua Alianza no está derogada. Segundo, porque Pablo sigue hablando de purificación después de la conversión, pasando a través del fuego.

En cuanto a lo del sacrificio de Cristo y el Purgatorio, ya te he comentado que esa purificación que necesitamos -no sé tú, pero en mí es evidente- la recibimos en el Purgatorio por los méritos de Cristo. Además, las almas que son enviadas al Purgatorio ya están salvadas y perdonadas, tanto, que sólo se concentran en amar a Dios, y carecen de impaciencia ante el cumplimiento de su voluntad, que es ya lo único que buscan.

Ya sé que no crees esto, pero te lo digo para que critiques la doctrina católica con más conocimiento de causa.

Emilio Alegre dijo...

Renton, para que veas que el haber sido redimido, y tus pecados perdonados por el sacrificio de Cristo, no es incompatible con que nos queden impurezas como consecuencia del pecado en el alma -y en el cuerpo-:

¿Tú eres salvo? ¿Y tu alma es completamente pura, careces de inclinación al pecado? ¿No te impacientas ante las adversidades, no tienes que luchar contigo mismo para hacer el bien? Es más, ¿acaso no vas a morir? Y ¿por qué vas a morir, si Cristo ya pagó por tus pecados? ¿No fue su sacrificio suficiente?

No quiero decir que el sacrificio de Jesucristo no fuera suficiente, todo lo contrario. Fue sobreabundante. Su sacrificio nos perdona y nos salva, pero no nos libra de la consecuencia ontológica del pecado, que es la concupiscencia, la enfermedad y la muerte, sino que a través de ellas y por los méritos de Cristo, hemos sido asociados a su sacrificio ante el Padre.

Renton dijo...

Longinos:
lo de decir que 2 Macabeos vale sólo para el antiguo pacto, me parece que es un recurso que te ha venido al pelo, pero no me parece válido. Primero, porque la Antigua Alianza no está derogada

Emilio por el amor de Dios, te prometo que los católicos mr rompeis el corazón porque ignorais las Escrituras.

Claro que el antiguo pacto está muerto, observa:

31 He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto (en la sangre de Jesús)con la casa de Israel y con la casa de Judá.

32 No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto; porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová.

Jeremías 31

Este pasaje es citado en Hebreos 10.

El viejo pacto está anulado, o es que el Templo sigue en pie?

Además, no es cierto que Dios ha levantado sacerdotes en todos y cada uno de los que han recibido Su Espíritu?

Y no es eso una evidencia de que la antigua Ley es obsoleta?

11 Si, pues, la perfección fuera por el sacerdocio levítico (porque bajo él recibió el pueblo la ley), ¿qué necesidad habría aún de que se levantase otro sacerdote, según el orden de Melquisedec, y que no fuese llamado según el orden de Aarón?

12 Porque cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley;

Hebreos 7

Claro que el antiguo pacto está derogado...

Longinos:
Segundo, porque Pablo sigue hablando de purificación después de la conversión, pasando a través del fuego.

Te refieres a cuando dice que será salvo como por fuego?

Lee el contexto y verás que no habla de Salvación...

:\

Renton dijo...

Longinos:
¿Tú eres salvo? ¿Y tu alma es completamente pura, careces de inclinación al pecado?

Pero Emilio, que nuestra alma haya sido redimida no significa que no suframos tentaciones, qué crees que es la santificación sino el moldeamiento a imagen de Cristo.

Además, recuerda este dramático pasaje de Pablo,

14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.

15 Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago.

16 Y si lo que no quiero, esto hago, apruebo que la ley es buena.

17 De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí.

18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.

19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.

20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí.

21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.

22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios;

23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.

24 !!Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?

(y como respuesta nos dice...)

25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
Romanos 7

Seremos tentados toda nuestra vida, no confundas eso con no ser salvo.

Es más, el hecho de confrontar a las tentaciones es una de las señales de ser de Dios.

12 Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
Santiago 1

Toda nuestra vida, hasta que muramos y nuestro cuerpo sea finalmente redimido, sufriremos tentación pues esa es nuestra naturaleza carnal.

Renton dijo...

Longinos:
Su sacrificio nos perdona y nos salva, pero no nos libra de la consecuencia ontológica del pecado, que es la concupiscencia, la enfermedad y la muerte, sino que a través de ellas y por los méritos de Cristo, hemos sido asociados a su sacrificio ante el Padre.

Para nada!

Y de nuevo contradicción, es sobreabundante, peeeero...

Emilio Alegre dijo...

Renton, ves contradicciones por todas partes, y para amoldarla a tu entendimiento, cercenas una parte de la Escritura. Muy bien todas tus citas sobre la caducidad del antiguo pacto, pero olvidas que Jesús no vino a abolir la ley, sino a darle pleno cumplimiento. O compatibilizas las dos cosas, o cercenas la Escritura.

Los justos del Antiguo Testamento se salvaron. Y si se salvaron sólo pudo ser por los méritos de Cristo, porque por sus propios méritos es imposible. A pesar de eso, se dice en la Escritura que Judas Macabeo ofreció sacrificios y oraciones por los muertos, obviamente no para que se les perdonaran los pecados, pues esto sólo puede ser por los méritos de Cristo, sino para colaborar a liberar su alma de las consecuencias naturales del pecado.

Ahora, dice San Pablo en 2 Cor 3, 12:

"Pues la base nadie la puede cambiar; ya está puesta y es Cristo Jesús. Pero, con estos cimientos, si uno construye con oro, otro con plata o piedras preciosas, o con madera, caña o paja, la obra de cada uno vendrá a descubrirse. El día del Juicio la dará a conocer porque en el fuego todo se descubrirá. El fuego probará la obra de cada cual: si su obra resiste el fuego, será premiado; pero, si es obra que se convierte en cenizas, él mismo tendrá que pagar. El se salvará, pero como quien pasa por el fuego".

Está hablando Pablo no de la salvación, sino de la santificación de los justificados. Y ve que hay quienes, siendo salvos, no han construido como debían, no se han santificado como debían. Ésos han de ser purificados. La redención de Jesucristo es sobreabundante y nos salva, pero no nos santifica automáticamente; ¿es que no es suficiente para santificarnos? Claro que sí, pero no ha querido Dios hacerlo así; ha querido que nuestra santificación nos resultara trabajosa, y en ella colaboramos, por ejemplo Pablo con su predicación, en la salvación de otros ("...en favor de su Cuerpo, que es la Iglesia").

Sabes que los cristianos ayunaban al enviar a otros a predicar el Evangelio. ¿Me puedes explicar qué valor tenía ese ayuno? ¿Cómo ayudaba a la predicación su ayuno? ¿Los calvinistas no ayunáis? ¿No rezáis unos por otros? Si lo hacéis, ¿para qué lo hacéis? ¿Es que el sacrificio de Cristo fue insuficiente, para que vosotros tengáis que rezar y ayunar?

Renton dijo...

Longinos:
Muy bien todas tus citas sobre la caducidad del antiguo pacto, pero olvidas que Jesús no vino a abolir la ley, sino a darle pleno cumplimiento.

Claro Emilio, pero tuvo que darle cumplimiento poruqe para que su justicia se nos pudiera imputar a nosotros, él tuvo que vivir una vida sin pecado.

A los que ponemos nuestra fe en el trabajo redentor de Jesús, se nos considera cumplidores de la Ley pues estamos en Cristo.

Esa es la base del Evangelio.

Mi pecado en él.

Su justicia en mí...

Longinos:
Está hablando Pablo no de la salvación, sino de la santificación de los justificados.

Exacto, muy bien.

Longinos:
Y ve que hay quienes, siendo salvos, no han construido como debían, no se han santificado como debían. Ésos han de ser purificados.

No Emilio, ahí no dice eso.

Todos los pecados del creyente los pagó Jesús.

Nosotros hemos muerto a la Ley, ya hemos sido juzgados en la cruz y el veredicto fue: culpable.

Recuerdas Hebreos?

14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

[...]

17 añade:
Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.


Cuál es la única manera de expiar un pecado?

Mediante la sangre.

22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.

La sangre de un substituto puro.

De ahí que se nos diga una y otra vez que el sacrificio de Jesús fue el último.

El último y suficiente.

Longinos:
La redención de Jesucristo es sobreabundante y nos salva, pero no nos santifica [...]
ha querido que nuestra santificación nos resultara trabajosa, y en ella colaboramos


Pues claro, una cosa es la Salvación, y otra la Santificación.

La primera la hace exclusivamente Dios, la segunda la opera el Espíritu Santo en nosotros, y en ella sí que tenemos parte.

No confundas una cosa con la otra, pues la Santificación, solo la pueden llevar a cabo los ungidos por el Espíritu Santo de Dios.

Longinos:
Sabes que los cristianos ayunaban al enviar a otros a predicar el Evangelio. ¿Me puedes explicar qué valor tenía ese ayuno? ¿Cómo ayudaba a la predicación su ayuno? ¿Los calvinistas no ayunáis? ¿No rezáis unos por otros? Si lo hacéis, ¿para qué lo hacéis? ¿Es que el sacrificio de Cristo fue insuficiente, para que vosotros tengáis que rezar y ayunar?

Hijo mío, de una en una...

Ayunamos, y oramos contínuamente los unos por los otros.

Hay una frase calvinista que dice, ora como si todo dependiera de Dios, y trabaja como si todo dependiera de ti...

:]

Emilio Alegre dijo...

Buena frase, Renton, pero es de San Ignacio de Loyola.

Por cierto, es lo que estoy intentando decirte desde el principio: el Purgatorio no es para salvación, sino para santificación. Los que van al Purgatorio ya están salvados, sus pecados están perdonados. Los protestantes creéis que las penitencias e indulgencias valen para la salvación y para el perdón de los pecados con miras a la salvación, pero no es así. ¡Nunca jamás ha sido así en la doctrina católica! Eso sería una herejía monumental. Una cosa es la justificación y el perdón de los pecados, y otra la expiación con vistas a la santificación, a la purificación para poder entrar en comunión plena con la Trinidad.

Renton dijo...

Longinos:
Buena frase, Renton, pero es de San Ignacio de Loyola.

En serio?
Bien por él!

Longinos:
Los que van al Purgatorio ya están salvados, sus pecados están perdonados.

Oh, gracias por la información, me documentaré sobre ello!

:]

Emilio Alegre dijo...

Rentom de nuevo, coges una parte de la Escritura, y como te parece incompatible (a ti) con otra, cercenas la otra y ya está. el problema es que estás interpretando la Escritura con una autoridad que no tiene base en la Escritura, y es tu propia colección personal de axiomas, que especifican lo que se ajusta o no a tu entendimiento.

Muy bien tu cita de Hebreos, de que no hay pago por el pecado fuera de Cristo, pero la tienes que compatibilizar con la de 2, Cor 13, 12ss., que nos dice que el que no ha construido bien tendrá que pagar él (no ya en vida, sino después, curiosamente como en el caso de los 2 Macabeos), como quien pasa a través del fuego.

¿Se pueden compatibilizar ambas cosas? Sí, pero sólo aceptando el misterio de nuestra participación en el sacrificio de Cristo, de nuestra inclusión en el Cuerpo Místico de Cristo, el Cristo Total que se ogrece al Padre. Así, nuestros sacrificios adquieren valor no por sí mismos, pero sí insertados en Cristo, no en sola justicia, sino por la justicia misericordiosa de Dios. Es un gran misterio. Pero sólo aceptando ese misterio se explica toda la Escritura, sin cercenar nada.

Así:

- Es verdad que el sacrificio de Cristo es único y sobreabundante, no sólo para salvarnos, sino también para santificarnos

- Nuestros propios sacrificios y nuestra propia muerte son asumidos en el sacrificio de Cristo, y en él insertados, participan de su valor.

Renton dijo...

Longinos:
pero la tienes que compatibilizar con la de 2, Cor 13, 12ss., que nos dice que el que no ha construido bien tendrá que pagar él (no ya en vida, sino después, curiosamente como en el caso de los 2 Macabeos), como quien pasa a través del fuego.

Eso NO es verdad.

Leamos la cita en cuestión:

11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.

12 Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca,

13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará.

14 Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa.

15 Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.

1 Cor 3

De entrada Pablo no nos está diciendo que cada uno tendrá que pagar nada para ser salvo, sino que sufrirá pérdida, es decir, no recibirá tanto galardón como aquellos que hayan edificado correctamente.

De qué nos habla Pablo?

Del galardón que recibirá cada uno en relación a las obras de santificación.

No entiendo cómo alguien leyendo este pasaje puede llegar a pensar que Pablo nos está hablando de tener que pagar un precio tras la muerte, la verdad...

Si te fijas en el contexto, Pablo nos está hablando de que todos somos servidores de Cristo, que ni él ni Apolos son nadie sobre los que edificar nada, solo Cristo:

4 Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?

5 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor.

6 Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios.

7 Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.


No edifiquéis sobre nosotros, les dice Pablo a los corintios, no os fijeis en nosotros que somos simples servidores, edificad sobre Cristo.

Esa es la única obra que pasará el jucio, el fuego del juicio de "ese día".

11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.

12 Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca,

13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará.


Obrad a partir de los dones que Dios os ha dado, edificad sobre la base que es Cristo, y el juicio de vuestro obrar visto a la luz de los dones, os dirá la recompensa que mereceis.

8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.

14 Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa.

15 Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.


Pablo no nos está hablando para nada de tener que pagar ningún pecado o impureza tras la muerte...

Nos está hablando de las recompensas que recibirá cada uno en relación al fruto dado.

Ojo, la recompensa no es la Salvación, tal y como pone en evidencia el 15abo versículo.

:|

Renton dijo...

Longinos:
¿Se pueden compatibilizar ambas cosas? Sí, pero sólo aceptando el misterio de nuestra participación en el sacrificio de Cristo

Cierto, se pueden, pero solo leyendo el contexto y no haciendo lo posible para encajar -donde no encajan ni a la de tres- doctrinas de hombres.

Longinos:
nuestros sacrificios adquieren valor no por sí mismos, pero sí insertados en Cristo, no en sola justicia, sino por la justicia misericordiosa de Dios. Es un gran misterio.

Oh no, no es un misterio, es solo la consecuencia de anteponer doctrinas de hombres, a la Palabra de Dios.

:\

Emilio Alegre dijo...

RENTON dice: "De entrada Pablo no nos está diciendo que cada uno tendrá que pagar nada para ser salvo, sino que sufrirá pérdida, es decir, no recibirá tanto galardón como aquellos que hayan edificado correctamente".

No, para ser salvo, no. No insistas en contestar a lo que no digo. Yo no digo que tenga que pagar para ser salvo, sino para ser santo, para entrar purificado en el Cielo. Eso lo dice Pablo cuando dice que tendrá que pasar por el fuego. Por ejemplo, si yo soy salvo pero me pirro por tener un cochazo, ese apego que tiene mi alma es algo de lo que tengo que purificarme. Y puede que me llegue la muerte sin darme cuenta antes de purificarlo. Entonces, tendré que pasar por el fuego, y ese apego será quemado (al hacerse eficaz ese paso por el fuego gracias a los méritos de Cristo).

RENTON DICE: "Si te fijas en el contexto, Pablo nos está hablando de que todos somos servidores de Cristo, que ni él ni Apolos son nadie sobre los que edificar nada, solo Cristo".

Estoy completamente de acuerdo, y sin embargo, hay algo más: ¿cómo interpretas este pasaje?:

"Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino que sois ciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. Estáis edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, y el mismo Cristo Jesús es la piedra angular. Por él todo el edificio queda ensamblado, y se va levantando hasta formar un templo consagrado al Señor. Por él también vosotros os vais integrando en la construcción, para ser morada de Dios, por el Espíritu". (Efesios 2,19-22)

El Espíritu y San Pablo nos dicen que no edifiquemos sobre el apóstol Pablo ni sobre Apolo, sólo sobre Cristo, y sin embargo, nos dicen también que estamos edificados sobre los Apóstoles, de los que Pablo es un claro ejemplo; ¿cómo es esto?

Renton dijo...

Longinos:
Yo no digo que tenga que pagar para ser salvo, sino para ser santo, para entrar purificado en el Cielo.

Emilio, cuántas veces te he adjunto versículos y versículos de la carta de los Hebreos?

10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

11 Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados;

12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,

[...]

14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

Hebreos 10

Te lo he dicho muchas veces, sigue con tu catecismo y deja la Biblia, en serio, no te hace falta enfrascarte en discusiones bíblicas pues si la Biblia dice blanco y tu catecismo dice negro, tú te vas a aferrar a tu catecismo, por tanto, tú a lo tuyo y yo a la Palabra de Dios.

Porque si Dios nos dice que el sacrificio de Jesús redime por completo a los de la fe, a los que han recibido el Espírtu Santo, así debe ser.

Me da igual que lo entiendas, que te guste, o lo que sea, la Palabra de Dios es clara.

Longinos:
, para entrar purificado en el Cielo. Eso lo dice Pablo cuando dice que tendrá que pasar por el fuego.

Pablo no está diciendo eso como te he demostrado del análisis del contexto del pasaje, por tanto, no le hagas decir a Dios lo que no dice.

Longinos:
si yo soy salvo pero me pirro por tener un cochazo, ese apego que tiene mi alma es algo de lo que tengo que purificarme.

NO!
Ese apego demuestra que nunca has recibido el Espíritu Santo.

Es posible ser tentado ocasionalmente, pero una vida deseando justo lo que es contrario a la Voluntad de Dios?

Imposible.

Longinos:
y sin embargo, nos dicen también que estamos edificados sobre los Apóstoles, de los que Pablo es un claro ejemplo; ¿cómo es esto?

Porque Jesús no se manifestaba cada día para predicarles a los Efesios!

La Palabra de Dios nos llega mediante las revelaciones que el Señor le dio a Sus profetas, no mediante la revelación que nos da a diario Dios!

Ya has olvidado el contexto de 1 de Corintios y el salvos como por fuego?

Qué leemos?

Justo lo que te estoy diciendo!

4 Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?

5 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor.

6 Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios.

7 Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.

1 Cor 3


En serio Emilio, quédate con tu catecismo, qué más te da lo que diga la Biblia?

Isa dijo...

¡Hola, Renton! Muy bien dada tu explicación. A propósito: ¿Existe el purgatorio? Sólo he leído la Biblia de tapa a tapa cuatro veces ¡para verguenza mía lo digo! :( y nunca he leído algo así. ¿Podrías tocar este tema?
Un fuerte abrazo desde el primer ayuntamiento de América.
Chuiquitos!!!!! :]

Renton dijo...

Isa:
A propósito: ¿Existe el purgatorio?

Eingh?
Obviamente no, pues el purgatorio implica aceptar que el sacrificio de Jesús y la obra del Espíritu Santo son insuficientes para santificar al creyente.

Pero no, Dios acaba lo que tempieza:

6 estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;
Filipenses 1

No es cruel el Dios católico que supone que deja caer en condenación a aquellos a los que les ha dado fe y dejado saborear al Espíritu?

Pero no, Dios garantiza la Salvación a aquellos a los que les ha dado Su Espíritu,

24 Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría,
Judas 24

En efecto, que todo por lo que el Señor les hace pasar a los suyos es para su bien -aunque sea con grandes sufrimientos- pues Dios controla su santificación.

13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
1 Cor 10

Chuiiiick!

:]

Renton dijo...

Emilio, vivir en la Gracia significa saber que Dios pagó el precio por tu pecado, que te limpió de todas tu impurezas y que te presentará a Dios sin mancha pues ahora eres su cuerpo.

Significa que confias en sus promesas, que aceptas su palabra cuando te dice que te moldeará a lo largo de tu vida para ser imagen suya tras tu muerte.

Si crees que una vez muerto, todavía te faltará algo para ser aceptable a él, entonces tampoc crees en esas otras promesas.

:|

Emilio Alegre dijo...

Renton, el Purgatorio no hace insuficientes los méritos de Cristo. Al contrario: en el Purgatorio, somos purificados gracias a los méritos de Cristo.

El sacrificio de Cristo es único, y los santificados, efectivamente, ya son puros para siempre. Pero esa obra de santificación, de purificación, no es inmediata. Cuando Dios nos infunde la fe, aún tenemos mucho que purificarnos, que santificarnos. Por eso Pablo habla de los que construyen sus obras fuera de Cristo.

La Palabra dice una vez que nadie puede edificar fuera de Cristo, y sin embargo, dice otra vez que estamos edificados sobre los apóstoles. ¿Cómo puede ser? Dices tú que porque son contextos diferentes: en un pasaje se está refiriendo a que no se fijen en ellos, que sólo son mensajeros, y en otro se refiere a que la fe nos la transmiten los apóstoles y profetas. Es verdad, creo que esa explicación está bien. Pero hay también otra, complementaria, que subyace en esta aparente contradicción. Es ésta: no se puede edificar fuera de Cristo, y al mismo tiempo estamos edificados sobre los apóstoles porque Cristo y ellos son Uno. Los apóstoles, por sí mismos, no son cimiento, pero Cristo les infunde su calidad de cimiento, y los sostiene, para que nos sostengan también a nosotros. Ese es el edificio de la Iglesia. Cristo y la Iglesia son Uno. "Gran misterio es éste..."

Renton dijo...

Purgatorio:
En la teología católica, el purgatorio es un estado transitorio de purificación y expiación donde, después de su muerte, las personas que han muerto sin pecado mortal, pero que han cometido pecados leves sin haber sido estos perdonados o graves ya perdonados en su vida pero sin satisfacción penitencial de parte del creyente, tienen que purificarse de esas manchas a causa de la pena temporal contraída para poder acceder a la visión beatífica de Dios.

Lo que no entiendo es cómo puedes sostener que el sacrificio de Jesús es suficiente cuando a un tipo le quedan por pagar algunos pecadillos tras su muerte...

Tampoco entiendo que se defienda la expiación de un pecado sin derramamiento de sangre...

Tampoco entiendo...

John Piper dijo una vez que la falta de fe se traduce en dos situaciones: o rebelión abierta y rechazo a Dios.

O legalismo.

El catolicismo ha optado por la segunda.

Su falta de fe no les deja entender y confiar en el sacrificio de Jesús, les parece imposible que la sangre del Señor pueda cubrir todos sus pecados.

El asunto es que el catolicismo llama cristiano a todo bicho andante, cuando Dios llama cristiano exclusivamente a aquellos que por fe, han recibido el Espíritu santo.

Emilio Alegre dijo...

Bueno, Renton, no te enfades; creo que no has entendido bien cómo funciona el Purgatorio. Pero no quiero molestarte. Si te interesa, ya sabes que puedes leerlo en el Catecismo de la Iglesia Católica; esa fuente es la doctrina oficial de la Iglesia.

Si me permites una sugerencia, creo que se ganaría mucho tiempo (y tu blog sería mucho más riguroso) si, cuando vayas a criticar una doctrina católica, buscas su enunciado en el Catecismo (es muy fácil buscarlo, basta poner en google Catecismo y el tema que te interese) y señalas entonces qué de esa doctrina católica te parece incorrecto por no ser acorde con las Escrituras. Así no rebatirás lo que otros dicen que es doctrina católica, ni lo que tú piensas que es doctrina católica, sino que podrás estar seguro de rebetir lo que realmente es doctrina católica, o al menos lo que tú entiendes yendo a la fuente original.

Yo tengo ese problema con las doctrinas protestantes. No sé cómo buscar, por ejemplo, cuál es la doctrina calvinista actual, o la luterana, etc. Porque todos se basan en la Biblia, pero luego las doctrinas cambian de unos a otros. Así que conozco esas doctrinas puramente de oídas. No sé si habrá algo parecido al Catecismo en algunas comunidades eclesiales protestantes.

También me interesaría conocer en qué os basáis para considerara si un libro forma o no parte de la Escritura. No sé si actualmente aceptáis los mismos que nosotros o no. Sé que Lutero quitó los deuterocanónicos, pero no sé si eso se mantiene, o si en los calvinistas es distinto. No sabía si ibas a aceptar II Macabeos, por ejemplo. Creo que podrías dedicar alguna entrada a ello.

marcos dijo...

Pues Longinos , creo que como buen católico debes de saber que los protestantes solo reconocemos el Canon de Esdras ( tal cual los judíos ) ya que los demás libros ( los que tu mismo llamas deuterocanonicos , esto es de " segunda inspiración )contienen errores históricos , geográficos , algunos de los autores mismos reconocen no ser inspirados por Dios ( creo que el caso de los macabeos es uno si mal no recuerdo )

¿ Puede haber una inspiración menor para un libro de las Escrituras ? ¿ por que los sacerdotes Reconocieron que esos no eran sagrada Escritura?
La declaración blasfema que reza que "Roma halló espiritu en ellos" es meramente una excusa para justificar que SUS HORRORES Doctrinales solo tienen base bíblica en eso libros deuterocanónicos u los apócrifos del nuevo.

Renton dijo...

Longinos:
creo que no has entendido bien cómo funciona el Purgatorio.

No Emilio, el asunto es que no entiendes qué hizo Jesús en la cruz.

Su sacrificio fue suficiente, pagó por los pecados, por todos los pecados de su pueblo, en la cruz.

Ahora, los que creemos en él y recibimos su Espíritu, somos su cuerpo.

Un cuerpo que no tiene pecado.

Decir que en nosotros todavía quedan pecados por purrificar es manchar el cuerpo de Dios.

Suficiente, el sacrificio de Jesús fue suficiente y el último sacrificio aceptable por Dios.

EL último,

24 mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable;

25 por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.

26 Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos;

27 que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo.

Hebreos 7

No hay más sacrificios por los pecados, pues estos solo pueden ser expiados mediante la sangre, la sangre de un sustituto inocente,

22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
Hebreos 9

Que el sacrificio de Jesús sea el último es lo que garantiza que sea suficiente,

14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

[...]

17 añade:
Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.

Hebreos 10

Y fue suficiente porque quien se ofrecía era Dios Hijo, entiendes?

Decir que tras el sacrifico de Jesús hay quien tiene todavía pecados por pagar, es decir que el sacrificio de Jesús fue insuficiente.

Ni más, ni menos.

Renton dijo...

Hola Marcos, cuánto tiempo!

Marcos:
los demás libros ( los que tu mismo llamas deuterocanonicos , esto es de " segunda inspiración )contienen errores históricos , geográficos , algunos de los autores mismos reconocen no ser inspirados por Dios

Eingh?
En serio...?
Me documentaré sobre ello...


Dios te bendiga!


:]

Renton dijo...

15:37 Estos son los sucesos referentes a Nicanor. Como a partir de entonces la Ciudad quedó en poder de los hebreos, aquí mismo terminaré mi relato.

15:38 Si este ha sido bueno y bien logrado, no es otra cosa lo que yo pretendía. Si, por el contrario, es imperfecto y mediocre, lo cierto es que hice todo lo que pude.

2 Macabeos 15

Es cierto, no siquiera son inspirados por Dios.

:|

Renton dijo...

Prólogo del libro Eclesiástico:

"... Los que leen las Escrituras tienen el deber no solamente de adquirir ellos mismos muchos conocimientos, sino que deben ser capaces de ayudar, tanto de palabra como por escrito, a quienes no han recibido esta instrucción.
Así lo hizo mi abuelo Jesús.
En primer lugar se dedicó de lleno a la lectura de la ley y los profetas, y de los demás libros recibidos de nuestros antepasados, y alcanzó un conocimiento muy grande de ellos; y luego él mismo se sintió movido a escribir un libro sobre la instrucción y la sabiduría, para que, practicando sus enseñanzas, las personas deseosas de aprender puedan hacer mayores progresos viviendo de acuerdo con la ley".


Pasmoso, otro libro incluído en la Biblia católica que no es de inspiración divina...

Cómo se entiende tanto disparate?

Emilio Alegre dijo...

Bueno, no sé si me aclaro. ¿Me permitís que os concrete mis dudas? No sé cuál de las siguientes afirmaciones es la correcta:

A) Está establecido que los calvinistas acepten una determinada relación de libros como los únicos inspirados por Dios.

B) Está establecido que los calvinistas apliquen determinado criterio concreto para aceptar lo que es Palabra de Dios y lo que no, y cada calvinista puede aplicar este criterio según su propio y honesto entender.

C) Cada uno puede utilizar su propio criterio sobre los que es Palabra de Dios escrita y lo que no.

D) Ninguna de las anteriores.

Renton dijo...

Simplemente se consideran inspirados por Dios los libros que son inspirados por Dios, y no son producto de la mente del hombre.

19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;

20 entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,

21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.

2 Pedro 1

Si en un libro hay error o contradicción con un libro reconocido como inspirado por Dios, o el autor admite que es fruto de su voluntad... se rechaza.

:|

Emilio Alegre dijo...

Gracias por la respuesta.

Nosotros creemos en los libros inspirados porque así nos los presenta la Iglesia con su autoridad, que creemos que es la de Cristo. Dice San Agustín: "Ego vero evangelio non crederem, nisi me catholicae Ecclesiae commoveret auctoritas". Que quiere decir: Yo no creería en el verdadero Evangelio, si no me moviera a ello a autoridad de la Iglesia universal.

Renton dijo...

Incluso si el autor mismo de uno de los libros reconoce que no es inspirado por Dios...?

Pasmoso.

:\

Emilio Alegre dijo...

Lo pasmoso es por qué poco un libro pasa de ser Palabra de Dios a ser despreciada. Por el criterio de cualquier chiquilicuatre, que no distingue un huevo de una castaña... Por la presunción del propio criterio, que se mueve más que una veleta...

¿Qué sabrás tú, Renton, de cómo actúa el Espíritu Santo en un hagiógrafo...? Y sin tener ni idea, coges una libro que ha sido venerado por la Iglesia durante siglos como Palabra de Dios, anotado, comentado, estudiado por teólogos de todos los siglos, cantado, orado, que fue formaba parte de la traducción que usaban los propios apóstoles, ¡y lo desprecias y lo tiras a la basura! Sólo porque el autor dice que se sintió movido a escribirlo... ¿por qué no tiras el Evangelio de Lucas, o las cartas de San Pablo? ¡Tira todo lo que no te guste, hombre, no te esperes a que te lo diga nadie! En caso de duda... ¡a la basura!

Qué duro es seguir elpropio criterio...

Renton dijo...

Longinos:
Lo pasmoso es por qué poco un libro pasa de ser Palabra de Dios a ser despreciada.

Nada de despreciada, eso sí, no tiene valor teológico y si contradice lo que sabemos es Palabra de Dios, debemos ignorarla.

Hemos de valorar toda opinión, pero sin subordinar lo que Dios ha decidido que se preserve a lo largo de los tiempos.

Longinos:
¿Qué sabrás tú, Renton, de cómo actúa el Espíritu Santo en un hagiógrafo...?

Sé que el Espíritu Santo no es esquizofrénico y no se contradice... y cuando inspira a alguien, ese alguien lo sabe, y le da la Gloria necesaria y justa a Dios.

15:37 Estos son los sucesos referentes a Nicanor. Como a partir de entonces la Ciudad quedó en poder de los hebreos, aquí mismo terminaré mi relato.

15:38 Si este ha sido bueno y bien logrado, no es otra cosa lo que yo pretendía. Si, por el contrario, es imperfecto y mediocre, lo cierto es que hice todo lo que pude.

2 Macabeos 15

No me imagino a Pedro diciendo algo así...

Longinos:
Qué duro es seguir elpropio criterio...

Qué duro es ignorar una y otra vez la Palabra de Dios...

:\

Emilio Alegre dijo...

¿En qué te basas para decir que el hagiógrafo sabe que está escribiendo un libro inspirado por Dios y le da gloria?

En tu propio criterio. En cómo tú crees que actúa siempre el Espíritu Santo. Y te otorgas a ti mismo la autoridad sobre la Escritura, discirniendo lo que es sagrado y lo que no, lo que es de Dios y lo que no. El poder del que el Papa carece, lo tienes tú, y lo ejerces después de un ratito de considerar el tema. Impresionante...

El Espíritu Santo no eligió a Cervantes ni a Shakespeare, ni les infundió su capacidad para escribir, ni su cultura, ni su estilo narrativo. Romanos cultos, que habían leído a los clásicos griegos -Agustín, Jerónimo, etc.- inicialmente rechazaban los libros sagrados por el estilo brusco y poco cultivado de algunos de ellos, como el Evangelio de Marcos. Tampoco Pedro ni Pablo tienen un estilo brillante, no se puede decir lo mismo de la Carta a los Hebreos, que tiene un estilo más cultivado.

¿Has leído el principio del Evangelio de Lucas? Está dirigido a una persona en particular. Y por supuesto, las cartas de san Pablo, en las que aprovecha para pedir que le traigan el abrigo, los libros que se dejó en Tróade, protestar por fulanito que le ha hecho una jugarreta... Algunas ni siquiera están escritas pensando que se leyeren en público, como las de Timoteo y Tito.

Pero bueno, digo esto como dirigiéndome al super-Papa Renton, a ver si, desde esa cátedra en que se ha sentado, desde donde selecciona las Escrituras, emplea un poco más de tiempo y criterio en discernir con su imnpresionante autoridad, qué textos han sido inspirados por Dios y cuáles no. Es decir: estoy haciendo el tonto. Porque Renton, por mucho que sepa, jamás en su vida tendrá esa autoridad, porque no le ha sido dada.

Renton dijo...

Longinos:
¿En qué te basas para decir que el hagiógrafo sabe que está escribiendo un libro inspirado por Dios y le da gloria?

En tu propio criterio.


No, en el del hagiógrafo mismo, observa:

15:38 Si este ha sido bueno y bien logrado, no es otra cosa lo que yo pretendía. Si, por el contrario, es imperfecto y mediocre, lo cierto es que hice todo lo que pude.
2 Macabeos 15

Es obvio que Dios no ha inspirado nada ahí...

Longinos:
Porque Renton, por mucho que sepa, jamás en su vida tendrá esa autoridad, porque no le ha sido dada.

Ni falta que me hace.

:\

Emilio Alegre dijo...

Renton, te lo preguntaré de otra forma: ¿por qué un hagiógrafo tiene que saber que Dios le está inspirando y plasmarlo así? Es posible que no lo sepa. ¿Puedes justificarme eso con la Biblia en la mano? (Citándola, quiero decir, que contigo hay que andarse con ojo...)

Y de todas formas, la respuesta que me das es muy rara, no la entiendo: parece que quieres decir que si uno hace todo lo que puede, es imposible que Dios le esté inspirando. Pero no debe ser eso lo que quieres decir, no lo entiendo.

Renton dijo...

Longinos:
¿por qué un hagiógrafo tiene que saber que Dios le está inspirando y plasmarlo así?

Porque en caso contrario se atribuiría a sí mismo el mérito o demérito de lo escrito, y sus contemporáneos no podrían saber jamás que el Señor se ha revelado a través del tipo.

Longinos:
¿Puedes justificarme eso con la Biblia en la mano?

Podría darte un par de citas donde los autores son conscientes de que el Señor les da una revelación, podría citarte a Ezekiel, Pablo, Juan... en qué cambiaría eso tu modo de pensar?

En nada.

Tú crees que 2 Macabeos es inspirado por Dios porque lo dice tu iglesia y punto, por tanto, nada de lo que te diga podrá hacerte cambiar de opinión.

Longinos:
parece que quieres decir que si uno hace todo lo que puede, es imposible que Dios le esté inspirando.

No, no has leído mi última entrada titulada De Problemas con al Definición Arminiana de Libre Albedrío y el Espíritu Santo...?

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Emilio Alegre dijo...

Dije:
"¿por qué un hagiógrafo tiene que saber que Dios le está inspirando y plasmarlo así?"

Y respondes: "Porque en caso contrario se atribuiría a sí mismo el mérito o demérito de lo escrito, y sus contemporáneos no podrían saber jamás que el Señor se ha revelado a través del tipo".

Pienso que los escritos inspirados no fueron reconocidos de forma meramente natural por el Pueblo de Dios. Si los reconocieron como Palabra de Dios, fue porque se lo mostró el Espíritu Santo, que toma de lo de Cristo y nos lo da a conocer.

Renton dijo...

Longinos:
Pienso que los escritos inspirados no fueron reconocidos de forma meramente natural por el Pueblo de Dios.

Siento disentir.

Las epístolas de los apóstoles fueron inmediatamente reconocidas como inspiradas por el mismo Dios, igual que los Evangelios.

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Emilio Alegre dijo...

No estoy hablando de inmediatez, sino de cómo y por qué fueron reconocidos como inspirados por Dios. Y lo que digo es que no fueron reconocidos como inspirados por Dios por medios meramente naturales, por mera inteligencia humana, sino por la acción del Espíritu Santo sobre los creyentes.

(Aprovecho un instante al final de mi trabajo para responder, porque me he quedado sin internet en casa).