Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



martes, 17 de julio de 2012

De N.T Wright y el Shemá Yisroel en 1 Corintios 8:5-6...

En su ensayo Un Dios, un Señor, un Pueblo, N.T.Wright escribe lo siguiente,
6 para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.
1 Corintios 8:5-6
4 Oye, Israel: Yahvé es nuestro Dios, Yahvé es Uno.
Deuteronomio 6:4
Pablo, empleando otras palabras, ha glosado "Dios" "con el Padre", "y Señor" "con Jesucristo", añadiendo en cada caso una frase explicativa:

"Dios" es el Padre, "de quien son todas las cosas y nosotros para él", "y el Señor" es Jesús el Mesías, " por quien son todas las cosas y nosotros por él".

No puede haber ningún error, Pablo ha colocado a Jesús dentro de una declaración explícita de que el Dios de Israel es Uno y el único Dios, el Creador del mundo.

La Shema era ya, en esta etapa del judaísmo, de uso extendido como la oración diaria judía, pero Pablo la ha redefinido cristológicamente, produciendo lo que sólo podemos llamar una especie de monoteísmo cristológico.
Recomiendo la lectura de este ensayo, disponible en castellano gracias al hermano Luís Jovel.