Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



viernes, 14 de septiembre de 2012

De que bajo Otra Luz No Hay Gloria...

2 y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se hicieron blancos como la luz.
3 Y he aquí les aparecieron Moisés y Elías, hablando con él.

Mateo 17:2-3
En otras palabras, que la Ley y los profetas tipificados en Moisés y Elías-, solo encuentran su verdadera Gloria y significado a la Luz de la Palabra de Dios encarnada en Su Mesías.