Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



miércoles, 28 de diciembre de 2011

De que Dios Habla a la Sustancia de las Cosas...



Si leemos el relato de la Creación, comprobaremos que Dios habla directamente a la sustancia de la que son creados los seres.
A la tierra los seres terrestres,
24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así.
Génesis 1:24
Y a las aguas los marinos.
20 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos..
Génesis 1:20
Pero cuando Dios crea al hombre, el Señor no habla ni a la tierra, ni a las aguas, ni tampoco a las estrellas.
Malas notícias para todos aquellos que creen que somos polvo de estrellas...
Cuando Dios crea al hombre, habla a Sí mismo,
26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a Nuestra imagen, conforme a Nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra..
Génesis 1:26
De ahí que Dios haga al hombre a imagen y semejanza, pues la sustancia primera del ser humano proviene de Dios.
27 Y creó Dios al hombre a Su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó..
Génesis 1:27
Cierto, en Eclesiastés leemos que Dios a ha puesto eternidad en todo ser humano, pues el alma proviene de Dios y a Él vuelve tras la muerte física.
7 Entonces volverá el polvo a la tierra como lo que era, y el espíritu volverá a Dios que lo dio..
Eclesiastés 12:7
Ahora bien, podríamos pasarnos décadas debatiendo sobre qué quiere decir imagen y semejanza de Dios si no fuera por el Nuevo Testamento, donde la respuesta la da el mismo Dios.
15 El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación..
Colosenses 1:15
En otras palabras, que tal como es Cristo, así es Dios.

Ahora bien, si tenemos en cuenta que Dios vive en un eterno presente, hemos de comprender que Dios sabía que Su Palabra se encarnaría en un ser humano, y que este viviría por toda la eternidad, por tanto, por qué Dios decidió crear este mundo y a los seres humanos si sabía que ocurriría tal cosa?

La razón es porque el ser humano es la expresión más precisa del carácter y naturaleza de Dios.
El hombre, no el ser caído tras la entrada del pecado, no confundamos las cosas.

Como acabo de decir, que Jesús sea la imagen de Dios quiere decir que tal como es Jesús, así es Dios, sin embargo, en la Palabra se nos recuerda de contínuo que todos aquellos redimidos por el Señor Jesús, están llamados a ser imagen de aquel que es imagen de Dios.
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos..
Romanos 8:29

En otras palabras, que tal como es Jesús, así debía haber sido el hombre, pues este fue creado a imagen y semejanza de Dios, y que tal como es Jesús así deben ser las Nuevas Criaturas.
Esto explica el por qué de la imagen del Lagar a la hora de describir el Juicio de Dios sobre los hombres pecadores.
1 ¿Quién es éste que viene de Edom, de Bosra, con vestidos rojos? ¿éste hermoso en su vestido, que marcha en la grandeza de su poder? Yo, el que hablo en justicia, grande para salvar.
2 ¿Por qué es rojo tu vestido, y tus ropas como del que ha pisado en lagar?
3 He pisado yo solo el lagar, y de los pueblos nadie había conmigo; los pisé con mi ira, y los hollé con mi furor; y su sangre salpicó mis vestidos, y manché todas mis ropas.
4 Porque el día de la venganza está en mi corazón, y el año de mis redimidos ha llegado.
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Isaías 63:1-4
En efecto, como hemos visto, la esencia del ser humano es ser imagen de Dios, de la misma manera que la esencia de la sal es salar.

Pero el Señor nos enseña que cuando una cosa pierde su esencia, no sirve para nada, de ahí que del mismo modo que la sal que pierde su esencia merece ser hollada, el hombre que ha renunciado a su esencia merecerá el Lagar...

Mientras meditáis en todo esto, dad las gracias a Dios nuestro Padre por todo en el Nombre de nuestro Señor Jesucristo...