Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



jueves, 18 de febrero de 2010

De Errores Doctrinales que Hacen Mover el Dedito a Calvino (3)

Nota: El autor de este blog advierte que en esta entrada un dedito se moverá...


Leo una extrañísima entrada titulada Cincuenta Razones Por Las Cuales Un Salvo Jamás Puede Perderse, la cual podría haberse titulado Más de Treinta y Cinco Razones Por Las Que Debería Dedicarme a Otra Cosa porque el autor comete una gran cantidad de errores...

En efecto, sin ir más lejos vemos que la razón número 17 reza así...
¡LAS OBRAS NO PUEDEN AFECTAR SU SALVACIÓN! Romanos 11:6; la salvación no es ganada por obras, por lo tanto no puede perderse por obras.
Ahá, yo también me he quedado de piedra...

Sea como sea, consultemos al Dedito de Calvino.

Dedito...

Dedito...

HABLAAAAAAAAAAAARGH!

Ahahá, el dedito nunca falla!

Pero, qué es lo que ha hecho que el bueno de Jean mueva incesantemente su dedito?

La incomprensión del papel de las Obras en la Salvación.

Pocos hermanos entienden el papel de las Obras y la Fe en la Salvación.

Los católicos -por ejemplo- creen que las Obras llevan a Salvación.

La vida es un contínuo almacenar buenas obras para poder presentarlas a Dios en un plato de la balanza, con la esperanza de que pesen más que las malas obras que ocupan el otro plato.

Has sido buenín?

Eres salvo.

Pero entonces uno recibiría la Vida Eterna como pago por sus buenas obras y la Salvación ya no sería por Gracia, y en la Biblia leemos claramente que la Salvación es por Gracia mediante la Fe, no por Obras para que nadie se gloríe.

Por tanto no, la Salvación no puede venir por las Obras que uno haga y nuestros hermanos católicos andan un tanto despistados con su fórmula:
Salvación = Obras
Después nos encontramos con la otra cara de la moneda, es decir, con los hermanos hipercalvinistas que nos dicen que -de acuerdo a la cita de Efesios 2:8-9 antes mencionada- la Salvación es por Gracia.

Por Gracia y nada más.

La fórmula que siguen estos otros hermanos es la siguiente,
Salvación = Fe
Pero ojo, es cierto que la Fe es lo que nos justifica y que sin Fe es imposible agradar a Dios, pero como la Bibla se lee como un todo y una parte no puede contradecir a otra, nos damos cuenta de que falta algo: las Obras.

En Santiago 2:17 leemos claramente que sin Obras, la Fe está muerta.

La Fórmula necesita una variable más: Obras.

La Salvación es por Fe.

La Salvación No es por Obras.

Pero las Obras juegan un papel.

Una de las fórmulas más populares a la hora de solventar este aparente entuerto es la siguiente,
Salvación = Fe + Obras
La Fe es importante, pero la Salvación depende de las buenas Obras que uno haga.

Parece lógico, no?

Pues está mal...

Demos a cada variable un valor numérico, es decir, convirtamos Fe + Obras = Salvación en 1 + 2 = 3.

Que 1 + 2 sea = a 3, significa que 2 es = a 3 - 1.

La fórmula se mantiene y es verificada.

Esto en lógica también se observa.

Si Fe + Obras = Salvación, entonces Fe = Salvación - Obras, también debe ser cierto.

Pero Santiago 2:17 nos deja claro que no es así...

Estamos ante un problema?

No, estamos más cerca de entender cómo uno es salvo.

Porque la fórmula a la que llegaremos no es Salvación = a lo que sea, la fórmula a la que llegaremos y que nos hará entender la Salvación es la siguiente,
Fe = Salvación + Obras
Efesios 2:8 nos deja claro que somos salvos por Fe, y Santiago nos dice que sin Obras la Fe está muerta, por tanto, la Solución al aparente problema es que la Obras deben acompañar a nuestra Fe.

A esto se refería Santiago cuando -en el versículo 18 del mismo capítulo- dice, Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras.
Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras
.

Los cristianos no hacemos buenas Obras para ser Salvos, hacemos buenas Obras porque somos Salvos.

Lo que la fórmula Fe = Salvación + Obras nos dice es que somos Salvos por Gracia mediante la Fe y nada más, pero la Fe que salva nunca viene sin nada más...

Jesús nos decía que todo árbol bueno da fruto bueno, no es cierto?

Mientras meditáis en esto, dad Gracias a Dios por todo en el nombre de nuestro Señor Jesucristo...





Gracias a los tipos de Igniter Media por darme material para hacer esta entrada!