Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



martes, 6 de diciembre de 2011

De Argumentos, la Necesidad de Orar, y Reivindicaciones Definitivas...


26 Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil.
Mateo 26:41
Solo existe un argumento mayor sobre la necesidad de orar contínuamente, que el muy repetido de que la Palabra de Dios encarnada misma, en ocasiones oraba toda la noche.

Su vida.
Su espíritu de servicio extremo, la anteposición contínua de la Voluntad de Dios a la propia, la huída cuando querían hacerle Rey, su paciencia, Getsemaní, su silencio, su martirio, la cruz... su vida.

Su vida es la reivindicación total y definitiva de la necesidad de orar contínuamente en Espíritu y en Verdad, pues la oración no para que Dios haga nuestra voluntad, sino para que nosotros podamos hacer la Suya.

Mientras meditáis en todo esto, dad las gracias a Dios nuestro Padre en oración, en el Nombre de nuestro Señor Jesucristo...