Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



domingo, 18 de mayo de 2014

Me he trasladado...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Seguirás escribiendo? Es muy profundo y bueno lo que compartes. Un saludo. Que el Señor te bendiga!

Renton dijo...

Seguiré escribiendo hasta que Dios quiera.

Gracias por tus palabras anónimo y que Dios te bendiga!

:]

Anónimo dijo...

Entonces seguiré leyendo ;)
un saludo

Renton dijo...

Yo también...

:P

Anónimo dijo...

¿Eres cristiano evangélico no? ;)

soy anónima no anónimo jajajaja

Renton dijo...

Evangélico es una etiqueta que en el fondo no significa nada.

Soy cristiano reformado, pero no esperes encontrar en mí el típico reformado enemigo de arminianos...

Dios me ha sentado en una mesa donde caben hermanos con una muy sana diversidad exegética.

Dios te bendiga!

Anónimo dijo...

La verdad que me pierdo con los tecnicismos, lo maravilloso es que Dios no va a eso sino a nuestro corazón y la actitud que tenemos hacia Su Palabra. Qué privilegio haber llegado a conocerle sea que nos llamemos evangélicos, reformados u otras cosas. Bendito sea el Señor!

Buenas noches