8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.El Reino de Dios está en medio de vosotros, dijo el Señor a unos hombres incapaces de comprender sus palabras al interpretar lo espiritual con mentalidad mundana.
Juan 3:8
Como dijo N.T. Wright, el hombre puede aceptar a un Jesús que después de todo permanece como una maravillosa idea en la mente y en los corazones de sus discípulos, pero lo que el mundo no puede aceptar es un Jesús que sale de su tumba e inaugura la Nueva Creación de Dios en medio de la antigua.
Y eso hizo el Señor.
Pero qué es el Reino Rents? pregunta.
El Reino es el Espíritu, pues uno es los primeros frutos de la Redención escatológica final cuando el Espíritu mora en él, y vive -en medio de la antigua Creación- como si ya estuviera en la Nueva, teniendo a Dios como su único Señor, amándole sobre todas las cosas, con todas sus fuerzas, con toda su mente, y con todo su corazón.
Pero Rents, no te pasas un poco, no es esa idea un poco fanática? me dicen.
Hmm, es sincera, o es que cuando uno se enamora de alguien, hay alguna otra persona o cosa que ocupe más la mente y acciones del enamorado?
Entonces estar en el Reino de Dios es como estar enamorado?
No exactamente, es como renovarse por dentro desgastándose por fuera, como haber nacido de nuevo y tener que aprenderlo todo desde el principio, es como una levadura que crece y crece en ti hasta haberlo leudado todo a imagen del Señor, es como una semilla chiquitita que crece hasta hacerse un árbol tan grande que pienso que ni el mismo mundo podría sostenerlo, es tan valioso como un tesoro encontrado en un campo que no vale nada, ya sabes, como una perla valiosísima por la que darías todo lo que tienes o nunca tendrás, es mengüar para que él crezca, es como sacar una red llena de peces de la que deshechas los malos, y los quemas junto a la cizaña, es lo que siempre ha estado pero que ahora te ha sido dado descubrir, es como ser el único ser libre con la facultad de ser el siervo de todos, es como olvidarse de uno mismo al tener en mente a todos, es vivir confiando a pesar de no comprender muchas cosas, es saberse burlado, despreciado, ridiculizado, compadecido y saber que es parte del premio, es como ser Uno con una multitud incontable, y sabes? no está allí, no está allá, sino en medio de nosotros, en ti...
Y en mí.
Mientras meditáis n todo esto, dad las gracias a Dios nuestro Padre por todo en Nombre de nuestro Señor Jesucristo...
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