13 Las viandas para el vientre, y el vientre para las viandas; pero tanto al uno como a las otras destruirá Dios. Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.Ciertamente, este es uno de los versículos más complejos de entender de la primera Epístola a los corintios, pero tiremos del hilo para desanudar el nudo gordiano.
1 Corintios 6:13
Antes de nada, contexto.
La raíz del problema deriva del hecho de que algunos corintios habían caído en el error de creer que tenían libertad para comer todo tipo de comidas.
Ah, es que hay comida 'kosher' para el cristiano?
Oh no, podemos comer lo que queramos mientras demos gracias a Dios, no obstante, recordemos que Pablo establece un condicionante: No comas nada que pueda ser tropezadero para algún hermano débil.
El asunto es que algunos corintios creían que la libertad de las restricciones impuestas por la Ley judía, justificaba su libertad en asuntos sexuales.
Pero qué tiene que ver eso con el hecho de que Pablo, inmediatamente después, nos hable de la resurrección?
La clave, me temo, se encuentra en el paralelismo que el mismo Pablo establece en dichos versículos.
En efecto, las tres primeras frases del versículo 13 , son estructuralmente paralelas con la cuarta del versículo 13 y el 14.
13 Las viandas para el vientre, y el vientre para las viandas; pero tanto al uno como a las otras destruirá Dios.
Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.
14 Y Dios, que levantó al Señor, también a nosotros nos levantará con su poder.
1 Corintios 6:13-14
Ahora bien, en castellano dicha estructura paralela se pierde, de ahí que yo permaneciera en la inopia hasta que un hermano estudioso del griego antiguo me lo hizo notar.
Según me ilustró, las tres primeras frases del versículo 13, enlazan con las siguientes frases pues se emplean las mismas preposiciones.
La cosa quedaría así:
Las viandas para el vientre = Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor comparten una misma preposición, de ahí el paralelismo.
Y el vientre para las viandas = y el Señor para el cuerpo comparten una misma preposición, de ahí el paralelismo.
Y finalmente, Pero tanto al uno como a las otras (vientre y viandas) las destruirá Dios = Y Dios, que levantó al Señor, también a nosotros nos levantará con su poder comparten también una misma preposición, de ahí el paralelismo.
Se ve más claro ahora?
Bien, pero por qué esto tendría que ayudarnos?
Porque primero Pablo está simplemente citando las creencias erradas de los corintios respecto a la comida y el sexo, de ahí que Pablo las corrija al decir que Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo, y Dios, que levantó al Señor, también a nosotros nos levantará con su poder.
Es decir, muchos corintios, haciéndos reflejo de la cultura imperante en la época, creían que el sexo era otra función corporal como el comer, y que en el fondo tanto da lo que uno hace con su cuerpo, pues tenían la errónea creencia de que los cristianos dejarían el cuerpo atrás y vivirían como espíritus tras su muerte.
Dado que se consideraba al cuerpo perecedero, se pensaba que lo que uno hiciera con él no tenía transcendencia -en el sentido que no repercutía en lo Transcendente/espiritual- mientras uno cultivara su espíritu.
Esta es la razón por la que Pablo refuta dicha creencia al decir que Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo, lo cual anticipa lo que dirá unos pocos versículos después, es decir, Porque habéis sido comprados por precio (la vida y muerte de Jesús en nuestro lugar), glorificad a Dios con vuestro cuerpo y vuestro espíritu, los cuales son de Dios
No nos pertenecemos, pues al haber sido rescatados de la Muerte, hemos sido liberados del yugo de la esclavitud al pecado y sus consecuencias, y ya somos siervos de la justicia en cuerpo y alma, los cuales son del Señor, de ahí que el modo que tratamos tanto a lo primero como a lo segundo tenga dimensión espiritual.
Algunos corintios, al decir que Dios eliminaría estómago y viandas, pretendían enfatizar que tarde o temprano llegaría el día en que tanto el cuerpo como sus funciones perderían relevancia.
Pero Pablo les recuerda que seremos levantados/resucitaremos no como espíritus vaporosos e intangibles, sino que recibiremos un cuerpo espiritual, es decir, un cuerpo físico pero con propiedades espirituales, tal como lo fue el cuerpo del Señor Jesús tras su resurrección, cuyo cuerpo podía ser palpado, podía comer y beber, tanto como atravesar muros.
Este tema lo retoma Pablo más adelante en la misma epístola,
42 Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción.Nuestro cuerpo y lo que hacemos con él es importante desde el momento en que su dueño lo es Dios, de ahí la advertencia a no unirnos con prostitutas para que no seamos una carne con ellas.
43 Se siembra en deshonra, resucitará en gloria; se siembra en debilidad, resucitará en poder.
44 Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual.
45 Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu que da vida.
46 Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual.
47 El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo.
48 Cual el terrenal, tales también los terrenales; y cual el celestial, tales también los celestiales.
49 Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial.
1 Corintios 15:42-49
Por tanto, qué es lo que les dice Pablo a los corintios?
Lo siguiente:
Todos vosotros creeis que el cuerpo será deshechado, lo cual es un error, pues Dios no abandona Su creación: la transforma.Y amén...
Nos levantaremos de entre los muertos, pero nos levantaremos de cuerpo, alma y Espíritu Santo, de ahí que debamos servir al Señor con nuestro cuerpo y alma, en el Poder del Espíritu Santo.